La uña de gato (uncaria tomentosa) es un arbusto trepador y leñoso que mide hasta 15 metros de largo. Su nombre proviene de las espinas que crecen a lo largo de los tallos con forma de gancho que se asemejan a la garras de los gatos. Esta planta crece en las selvas tropicales de Brasil, Perú, Colombia, México, Ecuador o Puerto Rico. Es en estos lugares donde los pueblos indígenas la utilizan desde hace más de 2000 años para tratar el asma, las inflamaciones del tracto urinario, la artritis e incluso el cáncer.
Hoy en día esta es una de las plantas más demandadas para el tratamiento de diversas enfermedades que en este artículo trataremos. Debido a esta gran demanda su producción está muy controlada y regulada siendo una especie en protección para evitar su desaparición. A la hora de comprarla hay que fijarse bien en que estamos adquiriendo la especie uncaria tomentosa y no otra de las diferentes variedades existentes de esta planta, ya que esta es la que más poder curativo tiene.
Propiedades y beneficios de la uña de gato
Muchas son las propiedades que nos otorga esta planta medicinal, siendo una de las plantas más estudiadas en el último siglo. Los alcaloides que contiene, el más conocido el oxnidol, parece ser que son los más reconocidos en los estudios científicos que han demostrado tener propiedades inmuno-estimulantes y anti leucémicos, el resto de sustancias químicas han documentado acciones antiinflamatorias y antivirales. En la actualidad es muy demandada para el tratamiento de la artritis e inflamaciones de todo tipo, la uña de gato actúa reduciendo la hinchazón y el dolor que esta genera en las articulaciones.
En el aparato digestivo actúa limpiando los intestinos en profundidad eliminando cualquier residuo y ayudando a realizar mejor las digestiones. El sistema circulatorio también se ve beneficiado porque limpia y desintoxica la sangre eficazmente acabando a la vez con todos los virus que puedan alojarse en ella, gracias a esta limpieza reducirá la presión arterial.
Su acción inmunoestimulante aumentara nuestras defensas y nos ayudará a combatir mejor las enfermedades como las gripes o los estados febriles. El conjunto de su acción antiviral e inmunoestimulante la convierten en una de las plantas más investigadas y utilizadas para el virus del sida (VIH) ya que parece que impide que el virus se siga desarrollando en el organismo y al aumentar las defensas impedirá que aparezcan infecciones que son las que generalmente provocan más muertes en los pacientes de esta enfermedad.
Recientes estudios indican que la uña de gato ayuda a prevenir el cáncer o si este ya ha aparecido colabora frenando el crecimiento de las células cancerígenas y repara las dañadas por el efecto de la quimioterapia y radioterapia. La mejor forma de aprovechar sus virtudes es consumiéndola en forma de tintura, cápsulas o infusión.
Consultar antes con un profesional de la salud para que nos de las indicaciones adecuadas para cada caso.
Contraindicaciones de la uña de gato
La uña de gato no presenta grandes problemas a la hora de consumirla pero se pueden presentar casos de ardor de estomago. Las mujeres embarazadas no pueden tomarla por su efecto abortivo, tampoco en las enfermedades autoinmunes esta aconsejado su uso.