La tintura es la forma líquida concentrada de una hierba que se trocea previamente, esta conserva y concentra todas las propiedades de las plantas durante largo tiempo, hasta 5 años ya que están elaboradas con uno de los mejores conservantes, el alcohol, pero algunas se pueden realizar con vinagre de sidra de manzana o glicerina vegetal, siempre se toman por vía oral y es una de las mejores formas para que los niños lo tomen sin apenas enterarse ya que con unas pocas gotas es suficiente.
Las tinturas tienen la propiedad de que al estar en forma líquida entran fácilmente en el torrente sanguíneo absorviendose muy rápido en el organismo. Además si no nos gusta su sabor podemos añadir las gotas en los jugos o en las comidas.
Cuándo se utiliza el alcohol para su elaboración este no debe sobrepasar los 90 grados, lo ideal es que sea un alcohol de entre 45-90 grados. Generalmente las proporciones son 50-60 grs de la planta seca por ½ litro de alcohol de beber, no lo confundamos con el sanitario, si empleamos las partes frescas de la planta habrá que añadir más cantidad, unos 120 grs aproximadamente. Hay que tener en cuenta que también hay preparaciones en las que se añade agua a la preparación. Pues con esto dicho vamos a explicar el proceso de elaboración de dos tinturas para que veais la base de su preparación, luego es vuestra decisión elegir el tipo de planta para vuestras dolencias y para eso podeis acudir a nuestro listado de plantas medicinales.
Tintura de pasiflora relajante
Maceramos 120 grs de partes aéreas secas de pasiflora en 1 litro de alcohol de 60 grados durante 1 semana. Filtramos y tomar entre 1 y 2 cucharaditas diarias diluidas en agua.
Tintura de Ginkgo Biloba para la circulación
Dejamos macerando entre 30-40 grs de hojas secas de Ginkgo en ½ litro de alcohol de 60 grados durante dos semanas. Filtramos y pasamos a un frasquito con gotero. Tomar 5 ml con agua 2 o 3 veces al día.