El colesterol es una grasa que se encuentra en todas las células del organismo, es indispensable para el buen funcionamiento del cuerpo humano, pero cuando esta grasa se eleva en exceso puede provocar problemas graves, especialmente del corazón, y por lo tanto puede poner en serio peligro nuestra salud, es el caso de la arteriosclerosis (estrechamiento de las arterias).
Vigilar detalladamente nuestra alimentación es el paso más importante para empezar a reducirlo, disminuyendo sobre todo los huevos y los lácteos, existen plantas medicinales para combinar con nuestra dieta, estas son algunas de ellas:
Alfalfa. La fibra que contiene la alfalfa reduce la metabolización del colesterol a nivel intestinal y se minimiza la absorción de colesterol exógeno.
Té negro. Consumir infusiones de té negro nos beneficia en el descenso de los niveles de colesterol malo y aumentando los niveles de colesterol bueno por la acción de los poderosos antioxidantes que contiene este té, estos también evitan la aparición de placas de grasa en las arterias.
Alpiste. No solo es el alimento de los pájaros, aunque este no es el mismo que para el consumo humano, esta planta es además un buen aliado contra el colesterol. Sus semillas son las que mejor pelean contra él por sus especiales principios activos, numerosas investigaciones afirman que su enzima lipasa, destruye los depósitos grasos de venas y arterias. También el omega 3 que contiene aumentan el colesterol bueno ocupando así el lugar del colesterol malo.
El alpiste lo podemos encontrar en extracto líquido y seco y también podemos preparar un conocido té especifico para este fin que se prepara de la siguiente manera:
Lo primero es conseguir alpiste para consumo humano en forma de semillas, de estas utilizaremos dos cucharadas para hervirlas con una ramita de canela en 1 litro de agua durante 5 minutos, dejar reposar unos 10 minutos, colar y beber una taza de té en cada comida.